Desnudez de niño
enmascarado.
Nos vive una obscenidad
sin frutos.
Ojos clavados en la inmensidad
del vacío sin rostro.
Vuela majestuoso un pájaro
negro,
en el cielo, quieto.
En el presente, roto.
¡Salva el instante!,
desnuda el miedo.
Queda el instante frente al vacío.
El instante,
fecundado por la nada.
1 comentario:
esa nada está tan llena de cosas sin embargo.Demasiadas son inútiles sin soberanía, además.
el instante no vale, creo, si no hunde el continuo ajetreo donde no-pasa-nada, y se yergue como acontecimiento
pero el acontecimiento es común, plural, singular-tripulación; si no es deudor de la inanidad mitológica anarquista de la insurrección-x-arte-de-m.; entonces es deudor de alguna-militancia que no abarcamos...
siento el exceso. gracias por volver. y, siga intentanto desplegar esas dolorosas alas del g.p.negro
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